El yoga y la energía son piezas fundamentales para la mejora de la salud en los seres humanos.
Con la práctica de la meditación y el yoga se aprende a no juzgar a los demás o a uno mismo, a mantener la tranquilidad ante las adversidades, a no dejarse influenciar por las opiniones de otras personas…
La práctica de yoga hace que la energía fluya, esto significa que el sistema nervioso, circulatorio, respiratorio, inmune…. funcionan de forma equilibrada, haciendo que todo vaya bien.
En la postura o asana hay una conciencia corporal física externa pero también interna, se puede conseguir que la energía fluya de forma perfecta haciendo una respiración limpia.
Tanto la meditación como el yoga hacen que haya una unión casi perfecta entre el cuerpo y la mente, esto hace que la energía se distribuya de forma casi perfecta.
La respiración se aconseja que se realice con retención de aire, de esta manera se suavizan los sentidos de la percepción y se relaja el cerebro.
Todos los seres humanos tienen dos canales por donde fluye la energía:
- Ida, es la energía femenina, de la luna. La luna tiene la energía negativa que aporta sosiego y frescura a la noche.
- Pingala, es la energía masculina, del sol. El sol tiene la energía positiva que representa la actividad durante el día y el calor.
El equilibrio perfecto entre ambos canales en el cuerpo hace que aparezcan la precisión y la fluidez.
La meditación mindfulness y el yoga generan equilibrio en la energía, de esta manera se mantiene la salud en las personas porque hay equilibrio entre la parte física, mental y emocional.
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